Hace mucho tiempo… en la Facultad de Teatro de la Universidad Veracruzana, Guadalupe padeció mucho para ser actriz y obtener su Licenciatura de Estudios Teatrales, es así que directores-tiranos como Raúl Zermeño, Germán Castillo, Luis de Tavira o Enrique Pineda entre otros, le echaron el ojo para hacerla sufrir más incluyéndola en sus obras y así torturarla con las técnicas teatrales de moda.

 

Se le recuerda como la novia rumbera en “La Boda” de Brecht, o la atlética Condesa Estela en “Lances de amor y fortuna " de Calderón de la Barca, en el papel de la valiente Elena en “Si bien acaba, bien” de Shakespeare, entre otras. Sin olvidar su última participación antes de saltar el charco, en el personaje de la juvenil y bailadora Lupita, alias el diablo con vestido azul, en la obra de “La Pira” de Oscar Villegas. Y si en alguna época manejó marionetas, nunca se dejo ella jalar los hilos...​

 

A pesar de sus dotes de nadadora es en avión que Guadalupe atravesó el océano Atlántico para ir a Francia y en el Conservatorio de Arte Dramático de Paris, bajo la dirección de Michel Bouquet balbuceó sus primeros textos en francés. Y para profundizar el asunto, decidió hacer una maestría en teatro en la Universidad de la Sorbona.

 

Al darse cuenta que los parisinos casi no se reían, se metió a hacerle al clown con Philippe Hottier, que también le hizo descubrir la técnica de la metamorfosis del maquillaje teatral y  en esos andares, descubrió  a Ariane Mnouchkine del Théâtre du Soleil con la cual aprendió sus ondas de máscaras.

 

Vimos entonces nacer de sus esfuerzos  El taller de Teatro y Danza, L’Évangile selon le clown, La Fiesta de Muertos, In Xochitl in Cuicatl y La Catrina.​ Después le entro la nostalgia de su tierra y con el apoyo de la Universidad Veracruzana y su cómplice Enrique Pineda montaron la obra de “Viva la Frida Kahlo”, la cual la intrépida Guadalupe la interpretaba en francés y en español,  así recorrió Europa y México durante 10 años en varios Festivales Internacionales, siempre jalando su botella de Tequila y su entrañable compañera de escena la calaca, tilica y flaca…

 

 Actualmente su encuentro con la Divina Juliette Dragon, creadora y fundadora del Cabaret y de la escuela de Filles de Joie (Escuela de las Chicas Alegres) Guadalupe ha terminado por descabellarse y lanzarse en el mundo del Cabaret New Burlesque, ahora su vida está llena de plumas, lentejuelas y diversión.

 

En ningún momento Guadalupe olvida sus orígenes, las tradiciones populares mexicanas y su familia, para la cual el arte constituye su modo de vivir.